Invertir no es algo exclusivo para aquellos con grandes sumas de dinero. Hoy en día, gracias a las herramientas disponibles, es posible comenzar a invertir con una pequeña cantidad de dinero y, con el tiempo, hacerla crecer.
En esta guía, te mostramos cómo comenzar con poco, destacando tanto los beneficios como los desafíos de este enfoque.
Comienza con un presupuesto limitado
Puedes empezar con una pequeña inversión. Algunas plataformas, como Vest, te permiten comprar fracciones de acciones, lo que significa que no necesitas adquirir acciones enteras de una empresa. Incluso si no tienes el capital para comprar acciones completas, esto facilita el acceso a grandes empresas.
Beneficios:
Accesibilidad inmediata: No necesitas esperar a reunir una gran cantidad de dinero para empezar a invertir.
Flexibilidad: Si tienes un presupuesto limitado, invertir en fracciones de acciones te permite diversificar desde el principio.
Oportunidad de aprender: Puedes aprender cómo funciona el mercado sin arriesgar mucho al comenzar con pequeñas cantidades.
Desafíos:
Ganancias modestas: Las ganancias iniciales serán limitadas porque estás invirtiendo una pequeña cantidad de dinero.
Impacto de las comisiones: Si inviertes poco, las comisiones por realizar retiros pueden afectar tus ganancias.
2. Invierte en fondos indexados o ETFs
Para quienes comienzan con poco dinero, los ETFs (fondos cotizados en bolsa) y los fondos indexados son una opción, ya que te permiten invertir en una colección de acciones o bonos en una sola transacción. Esto reduce el riesgo y ayuda a diversificar la inversión.
Beneficios:
Diversificación fácil: Invertir en un ETF o fondo indexado te permite obtener exposición a múltiples acciones o bonos, reduciendo el riesgo de pérdidas por la caída de una sola empresa.
Costos más bajos: Generalmente, los fondos indexados y los ETFs tienen tarifas más bajas que otros productos financieros.
Desafíos:
Menos control: Al invertir en un ETF, adquieres una cesta de activos y no puedes elegir en qué empresas invertir.
Crecimiento moderado: Aunque los ETFs pueden ofrecer un crecimiento estable, es menos probable que generen altos rendimientos a corto plazo en comparación con las acciones individuales.
3. Invierte pequeñas cantidades con frecuencia
Invertir regularmente es una de las estrategias más efectivas para comenzar con poco dinero. Gracias al interés compuesto, invertir pequeñas cantidades con frecuencia, como una vez al mes, puede generar resultados sorprendentes a largo plazo.
Beneficios:
Disciplina financiera: Realizar inversiones periódicas te ayuda a ser más disciplinado y constante con tus finanzas.
Efecto del interés compuesto: Si inviertes con frecuencia, puedes beneficiarte del crecimiento compuesto, lo que significa que tus ganancias también generan rendimientos.
Conclusión
Invertir con poco capital es sencillo para quienes desean comenzar en el mundo financiero sin arriesgar demasiado. Para diversificar y optimizar tus inversiones, es importante mantener la constancia y usar herramientas como cuentas automáticas, ETFs y acciones fraccionadas.
Con Vest, tienes acceso a todas estas opciones para comenzar con lo que tengas disponible, sin necesidad de invertir una gran cantidad de dinero. El objetivo final es ganar experiencia y paciencia.
Aunque los rendimientos iniciales pueden ser insignificantes, el desarrollo gradual y las contribuciones regulares son lo que realmente marcarán la diferencia a largo plazo.