Generar una encuesta es muy simple, pero requiere tener en consideración ciertos aspectos que definirán el éxito de la misma.
Cómo primer paso es clave establecer el objetivo que buscamos alcanzar con la encuesta, esto definirá que respuestas necesitamos y, por ende, que preguntas realizar.
Definida la meta a alcanzar, debemos tomarnos el tiempo necesario para analizar qué tipo de respuestas queremos poner a disposición para cada pregunta. Existen preguntas de tipo abierta, en las que se les solicita a los encuestados que brinden sus comentarios, y preguntas cerradas, mediante las cuales se les brinda opciones establecidas previamente.
Sin embargo, también tenemos que considerar otros aspectos tales como de que manera formular las preguntas. A continuación podrás ver algunos consejos que te serán de utilidad a la hora de formular las preguntas.
1 . Menos es más
Las encuestas que son cortas, directas al punto, y son lo más clara posible, resultará en mayores tasas de respuesta y más precisas. Si necesitamos obtener varias respuestas, es preferible dividir la encuesta y lanzarla en etapas. La duración de la encuesta debe ser lo suficientemente corta para que no le tome al usuario un promedio mayor de 5 minutos (o menos) para completar. Esto se puede lograr, por lo general, con alrededor de 10 preguntas o menos.
2 . Busca neutralidad en la formulación
Evita definir una pregunta que incluya una opinión en la formulación de la pregunta (o hacer una "pregunta sesgada"), ya que esto puedes influir en la respuesta de los encuestados, perdiendo la verdadera opinión que estos pueden tener.
3 . Evita generar dos preguntas en una sola
Las preguntas de tipo compuesta generan mucha confusión, pidiendo que en una respuesta se evalúen dos cuestiones diferentes, perdiendo, nuevamente, la verdadera opinión que tiene el encuestado. Un ejemplo de esto sería una pregunta de este tipo "¿Cómo evaluarías nuestro servició al cliente y la confiabilidad de nuestro producto?". La atención al cliente y la confiabilidad del producto son dos temas diferentes. Al incluir ambos en la misma pregunta, puedes obligar al encuestado a evaluar solo uno o a excluir la pregunta por completo.
4 . Evita replicar preguntas
Muchas veces se cae en el error de formular la misma pregunta una y otra vez, pero redactada de manera diferente. En este sentido, es clave entender que respuesta obtendríamos con cada pregunta y si las mismas se replican, es mejor suprimirla. De esta manera nos acercamos más a alcanzar el punto presentado previamente.
5 . Procura elegir correctamente las "preguntas obligatorias"
Cuando no estés seguro de si una pregunta debería ser opcional u obligatoria, inclínate a que sea opcional. Forzar a responder una pregunta que no quiere responder (porque lo incomoda) o no sabe realmente que respuesta dar, tiende a generar un abandono precipitado de la encuesta.
6 . Prueba la encuesta antes de lanzarla
Siempre es importante tener otras miradas previo a lanzar definitivamente una encuesta. Envíala a colegas para que te den su visión, identificar errores o recibir recomendaciones.
En resumen, redactar una buena encuesta significa formular preguntas de tal manera que los encuestados puedan contestar con sinceridad. Al mismo tiempo, significa proporcionarles una encuesta que se pueda responder de manera rápida y sencilla.