Es probable que tu músculo esté entrenando poco si, después de entrenar, no sientes que tu músculo realmente se esforzó (por ejemplo, no sentiste un bombeo, no sentiste tensión en el músculo y/o no sentiste ninguna tensión muscular en absoluto).

Tu músculo está recuperado si, después de una sesión de entrenamiento específica, claramente sentiste que tu músculo había estado trabajando (por ejemplo, sentiste tensión en el músculo y se sintió tensionado al final de los ejercicios). Después de 1-2 días, el músculo se sintió completamente fresco nuevamente y estaba listo para la próxima sesión de entrenamiento.

Tu músculo estaba completamente sobreentrenado al final de la sesión de entrenamiento y tu rendimiento disminuyó notablemente a medida que avanzaba la sesión. Después de 1-2 días, todavía sentías los efectos de la sesión de entrenamiento pasada y el músculo no se sentía listo para ser trabajado de nuevo (por ejemplo, todavía tenías dolores musculares significativos o una fuerte sensación de ardor en el músculo, dolor en las articulaciones cercanas al músculo, y/o tenías dificultades para activar el músculo).